Santiago González Vallejo | Grupo de apoyo de Madrid para la libertad de Pablo González
Pablo González es un periodista preso en Polonia acusado de ser espía al servicio ruso. Lleva preso desde el 28 de febrero de 2022. Su defensa no ha recibido las pruebas de esa acusación, porque todavía no se han formalizado los cargos. En estado de preso preventivo, como los presos administrativos que tiene Israel, ha estado incomunicado durante muchísimos meses. Encerrado 23h al día y siempre sin disfrutar el sol.
Julian Assange, vía Wikileaks, desveló crímenes de guerra y secretos de Estado de Estados Unidos, corrupciones de diferentes gobiernos, espionaje de unos países a otros, etc. Por eso, se le persigue. Estados Unidos le acusa de revelar algunos de sus secretos, incluyendo crímenes de guerra cometidos por sus fuerzas armadas ¡Claro! Ese es el deber de un periodista. El Reino Unido tiene pendiente la decisión de extradición a Estados Unidos. No el llevar a responsables estadounidenses o británicos ante la Corte Penal Internacional por crímenes de guerra. En todo caso, cualquier persona puede escribirle y le llegan las cartas.
Mr Julian Assange
Prisoner A9379AY
HMP Belmarsh
Western Way
London SE28 OEB
Reino Unido/UK
En cambio, puedo testimoniar que las autoridades polacas han devuelto, por lo menos, trece cartas dirigidas a Pablo González. Su culpa, hasta ahora únicamente reflejada en los medios de comunicación, es que tiene doble nacionalidad, española y rusa, por su origen de descendiente de niños de la guerra civil española; saber ruso y experto del espacio y países postsoviéticos y haber hecho crónicas desde el otro lado, Donbass, etc; estar incluido en una lista espuria sobre periodistas catalogados como pro rusos, pero sin aportación de desmentidos o falsedades, financiada por Open Society Foundation. Pero alguna carta ha llegado,
Pablo González Yagüe, s Alexia
A.S. Radom ul. Wolanowska 120
26-600 RADOM
POLONIA/POLSKA
El gobierno español y la UE dejan hacer al gobierno polaco y que se implante un guántanamo en Europa. El caso de Pablo González ha llegado al Parlamento Europeo, a través de preguntas de europarlamentarios y encuentros con diversos grupos. Pero es insuficiente.
El gobierno español, la UE y la comunidad internacional están dejando que se impida el derecho a la libertad de información. Resquebrajando la democracia.
Es importante que muchas personas escribamos a Assange y Pablo González. Que se sientan acompañados. Que su llama no se apague, que la sigamos alimentando.