Entrevista del periodista Juanjo Basterra para Sare Antifaxista a Euskal Herria – Donbass Elkartasun Komitea

 

Dos miembros de Euskal Herria-Donbass Komitea, Jon y Xabi, analizan en esta entrevista de Sare Antifaxista la actualidad internacional en torno a Ucrania y las potencias mundiales de Rusia, Estados Unidos y China y a la guerra existente en el Donbass. La posibilidad de un conflicto armado y lo que hay detrás de esta tensión geopolítica y estratégica tiene por objetivo que la OTAN pretende ocupar más terreno en la Europa occidental y acercarse a las puertas de Rusia. El tablero se mueve en base a los intereses geopolíticos y armamentísticos, que juegan un papel fundamental por el control económico en el mundo. “En Ucrania, las potencias imperialistas ven que su predominio económico va cayendo e intentan, a la vez, satisfacer lo que sustenta un poco a la economía estadounidense y encajonar a las potencias emergentes como pueden ser China, los BRICs e Irán”, dicen. Y recuerdan que allí en el Donbass “están acostumbrados, porque cada equis tiempo se anuncia una ofensiva de Ucrania. Ahora están bombardeando a diario prácticamente a las milicias populares”.

*Juanjo Basterra (jotabepress.news.blog) 

¿Cuándo surge el Comité Euskal Herria-Donbass, quė es y qué hace?

El Comité Euskal Herria-Donbass surge cuando en verano del 2014 empiezan las primeras operaciones militares, que como tal empiezan en mayo, y respecto a esas fechas está la ofensiva ucraniana en Slovíansk. Somos una coordinadora de Euskal Herria ideológicamente plural. No nos metemos en este partido u aquel, ni en esta u otra ideología, pero tenemos unas posiciones básicas que pueden resumirse en: antifascismo, anticapitalismo, defensa del derecho de autodeterminación de una manera un poco genérica.

No nos metemos en las luchas o en ese o aquel partido, ni tampoco en Ucrania, en Rusia o en el Donbass apoyamos a este o a aquel. Personalmente puedes tener más simpatías a unas figuras o partidos, pero no apoyamos a ninguno en concreto. Entendemos también que al ser Donbass una zona de tradición obrera y soviética -cuidado no queremos decir con esto que las repúblicas populares de allí sean la revolución socialista o sean marxistas ni nada de eso-, pero sí es una zona de mucha tradición soviética, la gente de allí ve la Unión Soviética como un estado en el que se vivía mejor. Esa cultura política, puedes decir que eso no es política es identidad, pero esa identidad se permea en la actividad política.

El Donbass al ser una zona de cultura política, nuestro comité obviamente también tiene simpatía hacia la URSS. Participamos en las marchas del Primero de Mayo en la victoria antifascista. En esto no quiere decir que entramos en los debates de la construcción del socialismo en la URSS, si tiene que tirar más para aquí o para allí, aunque tenemos simpatía por el Estado soviético, como lo tienen los habitantes del Donbass, pero esa simpatía no la trasladamos a una batalla ideológica. Somos un comité con ciertas bases mínimas.

¿Cuántos sois?

Los primeros años éramos como unos 25. Ahora estamos unas siete personas y gente que puntualmente colabora, con algún cartel; nos manda información, pero en el comité estamos siete personas.

Por ir a algo directo y que podamos desvelar sobre la creciente tensión en esa parte de Europa occidental, ¿qué es lo que está pasando en Ucrania?

Aquí se han implicado muchos actores, cuando ocurre así no podemos pensar que tenga que ver sólo con Ucrania. Ya ocurrió en la guerra de Nagorno Karabaj hace poco, una guerra entre Azerbaiyán y los indep

endentistas armenios, donde se vio que hubo una implicación de otros actores como Turquía, Irán, que abrió la boca un poco, aunque no se atrevió a implicarse, Rusia también estuvo ojo avizor… Cuando estamos hablando de esta escalada de repente no podemos pensar que es aislada.

El tema aquí es que las potencias imperialistas ven que su predominio económico va cayendo, y ellos intentan, a la vez, satisfacer lo que sustenta un poco a la economía estadounidense, que es una economía armamentística, y, por otro lado, encajonar a las potencias emergentes como pueden ser China, los BRICs (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) e Irán. No hay que olvidar que Rusia ha dado asistencia a países latinoamericanos y que Trump, si bien en algunos conflictos tuvo una línea más moderada que sus predecesores, tuvo una línea muy agresiva hacia China, que viene desde la época Obama; Trump profundizó y Biden está profundizando mucho más.

Biden representa un poco a los halcones de la Administración estadounidense, contrariamente a lo que se pensaba en las elecciones. Se decía que el otro estaba loco, éste no está loco, es coherente, pero es peligrosamente coherente. Creo que tiene que ver cada vez más con encajonar a Rusia y, sobre todo, a China.

Por otra parte, hay que tener en cuenta que Estados Unidos se retiró unilateralmente de todos los tratados de no proliferación de armas, y luego en el último tratado que Rusia propuso, Estados Unidos dijo que no. Estados Unidos se reserva siempre la carta en la manga para poder hacer, porque sabe que su gasto militar es mucho mayor que el ruso. El gasto militar ruso representa el 3% del mundo, es mucho, pero comparado con el resto es una ridiculez. Invierte mucho en tecnología y todo eso, pero a Estados Unidos, al final, por cantidad, tanto por bases en el mundo como por numero de misiles, etc esa proliferación le conviene.

Y ¿por qué en Ucrania?

Por una cosa, porque desde los pactos Minsk II (acuerdo para poner fin a la guerra en el este de Ucrania), que se firma en 2015 entre Ucrania, las repúblicas populares y el cuarteto de Normandía más dos: Estados Unidos, Francia, Alemania y Polonia, más Rusia y Ucrania, se comprometen que esos territorios vuelvan a Ucrania, pero con una autonomía más o menos federal. Pero para que vuelvan, tiene que volver como sujeto político. La parte militar de esos pactos del Minsk se cumplen o no. Se pacta una tregua, una desmilitarización de la zona de contacto y unas veces se cumple y otras, no, porque llevan con intercambios de tiros mucho tiempo. Más por parte de Ucrania, está claro.

Sin embargo, la parte política no se ha cumplido, porque exigía un desarrollo constitucional, elecciones y una asamblea constituyente en Ucrania, en las zonas liberadas en Donbass, y una vez elegidos los representantes constituyentes, se escribía que esas zonas volverían a Ucrania con una amplia autonomía. Esa parte no se ha cumplido, entonces al no cumplirse y al haber ahí una especie de quiste es una puerta abierta a este tipo de escaladas.

Pero, ¿por qué surge ahora mismo escalada?

Llevaban años intentando dar ese paso, pero lo han impulsado ciertos factores como que el presidente estadounidense, el actual inquilino de la Casa Blanca, es mucho más agresivo hacia Rusia, que lo que fue el anterior. Hacia China ambos son igual de agresivos. Se da también que hay ciertas crisis políticas de casi todos los estados implicados, porque un estado implicado es Gran Bretaña y está en una crisis política. La misma Rusia está en situación de debilidad porque hay una crisis económica, un decrecimiento y la oposición en Rusia, tanto la liberal como la comunista, ha crecido y Putin puede ver que el consenso social putinista, que funcionó durante largos años, igual se puede resquebrajar, igual pueden aprovechar por ahí.

Después hay que tener en cuenta lo que ocurrió en Kazajstán. Fue una operación que desde el punto de vista ruso no salió mal. Han puesto un presidente, que es más prorruso que el anterior, que todavía tenía mucha sombra. Han entrado, parece que han acabado las protestas. Han vuelto y puede ser que estemos en una zona de mucho desgaste hacia Rusia, y se aprovechen.

También hay que tener en cuenta la situación interna de Ucrania. Votó un presidente menos belicista, en principio, Volodímir Zelenski. Es un actor televisivo, que tiene esa idea de estos políticos burgueses no partidistas de cambiarlo todo dentro del sistema, y que ve que no puede, y Zelenski creo que está siendo o un rehén de las antiguas estructuras de los tiempos de Petró Poroshenko o sigue la línea.

En realidad, Ucrania, no ya este presidente, porque no ha dicho que esté amenazado por Rusia, pero países como Rumania, Hungría, incluso Croacia, han dicho que no hay guerra, que son necesidades de Estados Unidos.

Esta tarde (28 de enero, cuando hicimos la entrevista) Zelenski ha hecho unas declaraciones diciendo que no es para tanto. Que hay que rebajar el rumor. Y ha preguntado a Estados Unidos que diga de una vez si están dispuestos a que Ucrania entre en la OTAN, porque el tema no está nada claro.

¿Va entrar en la OTAN?

Ucrania no puede entrar en la OTAN como tal, aunque de facto es casi un miembro de la OTAN, porque hay tropas combinadas de Ucrania y países de la OTAN, como puede ser Polonia; pero no puede entrar porque al ser un país con disputas territoriales como Crimea, etc los estatutos de la OTAN no lo permiten.

Luego también pasa otra cosa con la OTAN que se resiste a desaparecer. Trump ya dio un aviso: ‘o ponéis más dinero todos o nosotros buscamos nuestro propio camino’. Ahí puede que haya como una especie de cohesión o de salida, aquí tenemos un ejercito servible vamos a hacerlo servible de alguna manera. La pregunta es a quién. Servible a Gran Bretaña y Estados Unidos para evitar que otros países europeos formen un eje franco germano, París-Berlin, que puede tener su autonomía. Y no hay que olvidar que Alemania es el principal cliente europeo del gas ruso del Nord Stream, y tiene una línea moderada ante este conflicto.

Los estamentos militares y paramilitares ucranios, los ‘paras’ tiene mucha fuerza, sueñan con una resolución por la fuerza al estilo de la Crayina, en Croacia en 1995 en la operación Oluja. No se puede dar por varios factores, por un lado, porque la Crayina estaba alejada, porque estaba en Bosnia. La asistencia militar era difícil, pero en Ucrania, Rusia está a dos pasos. Luego, a parte de que Rusia no es Serbia, tiene muchos más aviones, tanques… Pensar en esa operación, que ya intentó Georgia con Osetia, pero no le salió bien. Pensar que puede haber esa operación unilateral de Ucrania contra el Donbass no es creíble.

¿Tenéis relación con organizaciones o personas del Donbass?

Tenemos una cierta relación. Hay que tener en cuenta que es un país bombardeado, un país no reconocido con las dificultades que supone en no disponer de oportunidades logísticas, etc y los contactos no son fáciles.

Hemos estado mandando material humanitario hacia allí. Lo enviamos a Rusia, y de Rusia entraba a Donbass. Tenemos personas de confianza, que tramitaba el material humanitario y también tenemos relación con la Caravana antifascista Banda Bassoti, que tiene relación con gente de allí.

Ahora con la que se está montando, ¿los del Donbass lo tendrán más crudo?

Sí. Es normal hay cierta histeria, porque los ciudadanos, que son los que menos información tienen, también los de la parte de Ucrania, son los que se ponen nerviosos, porque son los que antes van a sufrir todo aquello y los que menos saben lo que esta sucediendo. Se ve con preocupación, claro. Ven que gobierno de Ucrania les apunta a ellos

Llevan años de guerra. No ha habido una tregua. Se ha firmado alto el fuego tras alto el fuego, pero al de poco tiempo Ucrania rompe y sigue bombardeando la línea del frente. Sí que es verdad que en los últimos años ha bajado bastante la intensidad de la guerra, aunque este último año han subido el número de victimas. En total habrán muerto cerca de 90-100 militantes de las milicias populares del Donbass, siete civiles en la República Popular de Donetsk y creo que otro civil de la República Popular de Lugansk, y hay varios cientos heridos. Sí que es verdad que ha bajado la sensación de la guerra, pero la sensación de la población de que todavía están en guerra y la amenaza ucraniana está.

Pero, ¿la guerra continúa allí?

Están acostumbrados, porque cada equis tiempo se anuncia una ofensiva de Ucrania. Ahora están bombardeando a diario prácticamente a las milicias populares. Han estado una semana sin bombardear a Lugansk, pero no es lo habitual. Lo habitual es que haya siempre bombardeos.

Periódicamente siempre hay rumores de que Ucrania va a lanzar una ofensiva fuerte e intentar entrar en Donbass, pero llevan así los últimos cinco años. Esos rumores son cada equis tiempo, pero no pasa. Ucrania no lo sé, porque no soy experto militar, pero no sé hasta qué punto es capaz de lanzar una ofensiva armada. Sí es verdad que está mejor armada que hace ocho años y mejor entrenada…

El ejército ucraniano es menos dependiente de Rusia, más de la OTAN, al estar prácticamente dentro, lo que hace que sus arsenales sean comprados en la OTAN. Ucrania en el 2014 fue el primer cliente militar de Rusia, y hoy en día no.

¿Cómo se entiende eso con la guerra en Donbass, que es prorrusa?

En 2014, no había empezado la guerra. Al final el negocio es el negocio. Ahora Poroshenko, el presidente que salió del golpe de estado de 2014 y que ha estado cuatro o cinco años, está en juicios en Ucrania. Le acusan de traición por haber mantenido relaciones con las repúblicas del Donbass por la compra de carbón, que sirve y viene bien para la industria ucraniana. Ucrania compra al Donbass aún estando en guerra y atacando. Ahora a Poroshenko le van a juzgar.

Volviendo un poco a la inestabilidad que ha surgido en Ucrania, ¿Por qué creéis que ha saltado la OTAN?

Lo que hemos comentado antes, son las necesidades de los países nucleares de la OTAN, de los países anglosajones, para seguir su dinámica geopolítica más o menos.

Y ¿en qué posición queda Union Europea?

Los países de la OTAN de la Europa continental no están. De hecho, los aviones de la OTAN que mandan de Gran Bretaña van por Dinamarca, de ahí al Báltico. No pasan por Alemania, porque se ha negado a ceder su espacio aéreo. También se amenaza a Rusia con el bloqueo al sistema de transferencias de fondos, denominado swift, pero si ocurre eso significaría que Alemania no podría pagar el gas o tendría que hacer una especie de swift ruso, que está en marcha y no es tan importante. Pero desconectar a Rusia sería un paso más en la desdolarización de la economía mundial. No sé si le conviene a Estados Unidos ahora eso, ya que es un país deudor y además importador. No sé si le conviene que se desdolarice aún más.

El gas a Europa viene de allí, si cortan el gas…

Obviamente, por eso Alemania no actúa. De hecho, el líder de la oposición Friedrich Merz, ha salido con un comunicado diciendo que hay que sentarse en la mesa a ver lo que se puede hacer, en teoría siendo uno de los halcones.

Entonces, ¿esto de Ucrania ha sido un bluff?

He oído a gente entendida, a expertos que no son sospechosos de ser precisamente atlantistas ni otanistas, decir que el peligro de guerra es serio. Nunca ha habido una escalada tan seria, lo que pasa es que muchas veces con estas escaladas, los militares que suelen ser más realistas que los periodistas, muchas veces lo que se busca con esto es que el otro no entre en el juego y ceda. ¿Qué pasa si no cede? Es muy difícil que cuanto más fichas has movido poder dar marcha atrás o retirarte. ¿Un bluff? Creo que sí hay objetivos reales: que Rusia ceda en sus pretensiones.

¿Queréis decir que Rusia se está expandiendo y influyendo más a nivel mundial y se le trata de parar los pies?

En última instancia cuando cayó la URSS y llegó Boris Yeltsin al poder, prácticamente vendió el país a los intereses occidentales. Y Rusia es uno de los países con más recursos naturales del mundo y eso Estados Unidos lo controlaba con Yeltsin, le salían muy bien los negocios. Con la llegada de Putin eso cambió. Nacionalizó algunas áreas de la economia rusa y ha hecho una política nacionalista en cuanto a la economía rusa, defiende la soberanía de Rusia, etc y también detrás de todo este objetivo desde Estados Unidos se trata de controlar los recursos naturales de Rusia y esos recursos le servirían para competir con China con mayor eficacia.

También pasa otra cosa que los países nucleares de la OTAN, Estados Unidos y Rusia, tienen una crisis politica y todo esto es una manera de forzar esa situación. Detrás existe la industria armamentística, que tiene mucho poder. Una manera de crear estos conflictos que, aunque no estallen, también propician que se vendan muchas armas y es una manera de dar trabajo a las potencias armamentistas que están detrás, para engrasar la rueda económica. Rusia ha tenido ya dos conflictos importantes en Navorno Karabaj con Azerbayan y Kazajstán, incluso Afganistán. Si a Rusia se le presiona por todas las esquinas, y no olvidemos que tiene sanciones económicas, se puede profundizar en su propia crisis.

Lo que ocurre en este momento en el planeta es que frente a Estados Unidos está China, y Rusia empezaba a salir a tomar más posición.

Ya pero si tu obligas a Rusia y le obligas a militarizar toda la frontera, puede ser que China lo vea como una especie de prevención y cree un nivel de desconfianza entre China y Rusia. Es una manera de meter una desconfianza entre ambas potencias. Hemos dicho que Rusia ha tenido tres conflictos en sus fronteras en el último año que son Kaxasjtán, Nagorno-Karabaj y Afganistán.

Y por mencionar al Estado español, ¿cómo se ve su posicionamiento en este temblor político-militar que se está produciendo entre Ucrania, Rusia, Estados Unidos y la OTAN?

Es uno de los que menos tiene que ver en este conflicto, porque siendo un pais dependiente de gas, un cierre de gas de ruso, podría permitir a Argelia que suba los precios. Argelia es un país muy relacionado con Rusia y no le habrá hecho gracia que el Estado español mande alguna fragata y aviones.

El gesto simbólico es importante. Porque si Alemania no va; Italia no ha ido, los italianos siempre han sido muy hábiles; y Francia no ha ido, ¿quiénes han ido? Los países anglosajones; los antirrusos, no todos Rumania y Croacia, no; y España con su posición crea una imagen de un país agresivo. Y Biden se lo ha agradecido no invitándole a la cumbre de la OTAN.

No sé qué cálculo habrá hecho España, puede ser que en el equilibrio que tienen con Marruecos, Estados Unidos cambie ese equilibrio hacia el lado español frente a Marruecos, pero Marruecos es quizás el más proamericano y está al lado de Argelia, país prorruso. España igual ha hecho ese cálculo. También ha podido ser una jugada maquiavélica del PSOE para incomodar a Podemos y forzar su salida del Gobierno.

Bueno, propició que el líder del PP, Pablo Casado, hablase con el presidente Pedro Sánchez después de más de ocho meses sin hacerlo.

Ya, y tenemos a Andoni Ortuzar (PNV) que ya dijo mano dura para advertirle a Rusia que no ocupe Ucrania.

Si queréis añadir algo, estáis a tiempo.

Estamos dando charlas en Euskal Herria y en los próximos dos meses tenemos previstas siete u ocho charlas este mes de febrero, en marzo y en abril. Cuando Donbass estaba en los medios, en redes nos seguía mucha gente, luego se congela y se para. Ahora estamos en el pico y hay interés por conocer nuestra opinión, sin duda. Si la crisis ucraniana sigue adelante seguiremos haciendo charlas.

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