ENTREVISTA AL ULTIMO COMANDANTE DE LA BRIGADA PRIZRAK

*Esta es una entrevista realizada a Alexei Markov, el que fuera ultimo comandante de la Brigada PRIZRAK (hoy 4ª Brigada de la Milicia Popular de la Republica Popular de Lugansk – RPL),  publicada el pasado 4 de febrero en el periódico ruso “Literaturnaya Gazeta” y de la cual se hizo eco la edición “PolitNavigator”, cuya nota tradujeron lxs compañerxs del colectivo Internacionalistas 36 (https://vk.com/internacionalistas36) y que reproducimos a continuación.

EL COMANDANTE DE PRIZRAK SEÑALA EL PRINCIPAL PELIGRO EN UCRANIA

Rusia en el quinto año de la crisis ucraniana está mostrando la ausencia de una estrategia definida, mientras que Ucrania se transforma en un estado rusófobo enemigo en la misma frontera de la Federación Rusa. Sobre esto habla en la entrevista al periódico Literaturnaya Gazeta el comandante Alexey Markov, actual jefe del batallón Prizrak, encabezado antes por el legendario Alexey Mozgovoy.

“Rusia, desgraciadamente, no tiene una estrategia con respecto al Donbass, y reacciona según la situación, según el principio: si algo sucede, entonces veremos, con suerte se arregla sólo”  dice Markov.

“Hasta donde yo sé, cuando Kernes (alcalde actual de Jarkov) y Dobkin (diputado pro-ruso en la Rada del ex-Partido de las Regiones de Viktor Yanukovich) contactaron con Rusia para sondear cómo reaccionarían allá a la creación a la República Popular de Jarkov (se refiere a marzo del 2014), les dijeron: “vosotros echar adelante, nosotros veremos según los resultados”. Mientras desde Ucrania les dieron garantías de que en el caso de que Jarkov permanezca en la órbita de Kiev, ellos tendrían que ceder en algunas cosas, pero se les garantizaba la vida, no serían detenidos y que se les permitiría cierto espacio político…Teniendo en cuenta que Jarkov era una ciudad absolutamente pro-rusa, creo que Novorossia podría constituirse con tres repúblicas con la capital en Jarkov (segunda ciudad de Ucrania). Es posible que se hubieran sumado las provincias de Nikolayevsk, Odessa y Zaporojzye” puso como uno de los ejemplos Markov.

Ahora, supone el comandante, las esperanzas de un levantamiento en el Sur-Este no existen, trasmite el corresponsal de PolitNavigator.

“En los últimos cuatro años, la mayoría de aquellos que estaban dispuestos a alzarse o fueron asesinados, o detenidos, o se vieron obligados a abandonar el país. El Levantamiento en la retaguardia del enemigo simplemente no hay quien lo pueda encabezar… A pesar que visto desde afuera el poder político actual en Ucrania parezca un akelarre de esquizofrénicos, el SBU en su terreno trabaja con bastante eficacia” comenta Markov.

“Entre nuestros “patriotas” (denominación sarcástica entre la izquierda rusa a los partidarios de Rusia Unida) es costumbre de tomarse a broma e ironía a Ucrania, pero yo lo veo así – sí, los actuales políticos ucranianos están lejos de ser gente inteligente. Si, la ideología de la Ucrania de hoy es una abierta ideología canibalesca, cavernícola, como cualquier extremismo nacionalista, pero con todo esto el poder ucraniano tiene objetivos precisos y definidos.

Son: una victoria militar en el Donbass, la limpieza étnica de la población ruso parlante, la presentación de todo lo ruso como algo intrínsecamente enemigo de lo ucraniano y por lo tanto la prohibición del idioma ruso tanto a nivel oficial como en la vida cotidiana. Y en estos aspectos están teniendo éxito.

Reírse de ellos es bastante estúpido. A este paso en otros cinco años toda Ucrania podría convertirse en rusófoba. Ya ahora las jóvenes generaciones en gran parte se educaron con esa rusofobia. Los que tienen 40 – 45 años todavía recuerdan la URSS, donde todas las nacionalidades vivían como una familia. Pero la chavalada de 20 años ya creció en la atmósfera de una creciente rusofobia, para ellos es algo natural y sus hijos serán educados en ese espíritu.

Ahora estamos perdiendo no en el plano militar del conflicto, estamos perdiendo la lucha por el espíritu. Rusia no ha opuesto al proyecto canibalesco y rusòfobo de la actual Ucrania nada propio. No existe ningún proyecto pro-ruso. Ahora simplemente estamos esperando en que va a terminar todo esto – y puede acabar en nuestra derrota ideológica. Con este ritmo Ucrania se convertirá en un estado enemigo total. Tendremos otra Polonia, sólo que muy pobre pegada a nuestras costillas” advierte el comandante de Prizrak.