Casi ya 1 año y medio la propaganda del régimen putchista de Kiev ha alcanzado un grado inverosímil y me atrevo a asegurar, que sin parangón en la historia mundial en su odio antihumano, en su histeria anticomunista, y sobre todo rusófoba. parafraseando en términos físicos, diría que ha superado el punto de ebullición y se encuentra en estado de «vapor saturado». Pobre Goebbels, sus restos calcinados, estarán a punto de débil ardimiento. Al que parecía insuperable en la propaganda absurda y mentira (que al fin y al cabo alcanzan, por desgracia, buena parte de los objetivos), es superado y con creces.
Con la enorme y descarada ayuda financiera, informática e ideológica del Occidente los poderes ucranianos, junto con la prensa llamada «al fusil» y la jauría de activistas de organizaciones «no» gubernamentales, todas ultranacionalistas, intentan convencer a los pueblos/etnias de Ucrania (en realidad hay varias etnias muy compactas, suficientemente numerosas, para «poner sobre el tapete» cuestiones a decidir, y las ponen) de dos cosas fundamentales:
Primero – Rusia es un Estado atrasado, pobre, en decadencia y etapa moribunda
Segundo – Rusia es el enemigo número uno de Ucrania.
Joaquín Rodriguez
En una u otra medida, estas dos ideas fundamentales ideológicas de la política ucraniana actual consecuente y definitivamente se inculcaban por todos los medios al alcance en la conciencia de los ciudadanos de Ucrania durante los últimos 24 años. Después de febrero de 2014, tras derrocar el poder ucraniano legal, se convirtieron en el principal fundamento de la ideología oficial estatal.
El objetivo estratégico del Occidente -conversión de los pueblos de Ucrania y Rusia en enemigos irreconciliables. Esto, según la intención de los estrategas americanos harían imposible cualquier proyecto de integración entre Rusia y Ucrania.
¿Hasta dónde medraron en esto el régimen de Poroshenko, la UE y EE.UU.?
Sin duda alguna, se han cosechado éxitos notables. Y no nos debemos extrañar – el bombardeo masivo e intensivo de la propaganda nacionalista; el terror político y la guerra civil en el sureste del país ha impulsado crear en la conciencia de una parte de la población ucraniana no solo sentimiento negativo hacia Rusia, e incluso odio a todo ruso. No en balde proliferan en las ciudades de Ucrania las marchas histéricas nazis con antorchas, y una importante parte de los ciudadanos ucranianos, a pesar de hechos evidentes, se cree el mito oficial, que en el Sur-Este se combate no con las milicias populares, sino con el ejército regular de Rusia.
Pero yo no creo ni en los mitos oficiales ni de Kiev, ni del Occidente. Yo soy materialista; persona culta con acceso a los medios informativos del mundo a través de Internet (como muchos lo tienen, pero no quieren,. les es más cómodo creer y sin romperse la cabeza, en lo oficial, al poder y orden reinantes); persona capaz de analizar ese abundante y heterogéneo material informativo.
Ésa capacidad e inquietud analítica me ha llevado a las preguntas que pese a ser evidentes, – ¿es de tan escala irreversible? ¿Se cree en su masa la población ucraniana en una pobre, atrasada y moribunda Rusia? Para eso me dirijo a las cifras objetivas de estadística. De la estadística, y no de las encuestas sociológicas, manejadas e influidas en un clima de terror y miedo masivo. Me dirijo a los datos del Forum Nacional de los Sindicatos de Ucrania – en junio del 2013 en el extranjero se encontraba 1/3 de la población con capacidad laboral. Son 8 millones de personas. Y lo que es más interesante y «curioso», el 42% vivía y trabajaba en Rusia!!
En otras palabras, cerca de 3,5 millones de ciudadanos ucranianos prefieren vivir y trabajar en la » pobre» y «moribunda» Rusia para alimentar sus familias en la «euro integrada» y «democrática» Ucrania bajo un sabio mandato de Poroshenko y Yatsenuk. Sorprendentemente, el 72% de los inmigrantes trabajadores son de Ucrania occidental.… ¿Cómo explicaran estos irrefutables datos el poder de Ucrania y sus corresponsales a servicio?
Presenciamos una paradoja – los verdaderos patriotas galichanos, las 24 horas al día alaban a Stepan Bandera, UPA y a los «héroes» de hoy, verdugos de la población civil en Donbass y Lugansk, prefieren vivir y trabajar en el territorio de su más «acérrimo enemigo»!
Como tan paradójico es el hecho, que como resultado de la guerra «liberadora» del ejército ucraniano y las fuerzas voluntarias nacionalistas contra el «agresor» ruso, la mayor parte de sus regiones huyen con pavor al territorio del «agresor»! ¿Nos imaginamos, que los ciudadanos soviéticos después de la agresión de la Alemania hitleriana en 1941 contra la URSS, huyesen a Alemania?
Según la información reciente del SFM (Servicio Federal de Migración), en el presente se han dirigido 350.000 ucranianos solicitando asilo en Rusia, de ellos 325.000 ya lo han recibido. El ministro de exteriores de Rusia Sergey Lavrov en una conferencia de prensa oficial sobre los resultados de su encuentro con su colega italiano declaró lo siguiente: «Captó su atención, que Rusia es el segundo país en el mundo después de EE.UU. de flujo de emigrantes. Solamente en el último año, hemos recibido casi 1 millón de refugiados de Donbass».
Pero esto no desconcierta al régimen de Kiev, que sigue con la cínica falsedad de agresión rusa. La política propagandística está plena de curiosidades fantásticas, a primera vista poco explicables. Por ejemplo, en 2013 según los datos de varia encuestas sociológicas, el 52% de la población ucraniana y cerca del 80% de la juventud con ganas dejarían el país a la primera oportunidad. ¿Por lo visto este deseo fue condicionado o impulsado exclusivamente por el régimen de Yanukovich; «proruso, antioccidental y sangriento»? Pero qué sorpresa. Según los datos de la Agencia Europea de Inmigrantes (EASO) el número de ucranianos deseosos de abandonar su país en 2014, en comparación con el 2013, aumento en 14 veces!! El director ejecutivo de EASO, Robert Visser comenta – en 2013 buscaban cobijo en la UE 1060 ucranianos; en 2014 ya eran 14.000. Ucrania forma parte de la lista de los primeros seis países, solicitantes de asilo en UE -son Siria, Eritrea, Irak, Somalia y Nigeria. Sobran los comentarios. Los ucranianos corren de su país, al igual que los desgraciados ciudadanos de países, que fueron sometidos a siglos de yugo colonial y decenas de años de guerras civiles y agresiones desatadas por el Occidente con Estados Unidos, como no, a la cabeza. ¿Algo más que añadir? El corrupto, prorruso y «sangriento» Yanukovich derrocado, en el poder están las fuerzas pro europeas y antirusas y… los ucranianos huyen en número mayor?!
Se conocen, que de 22 países de la zona Schengen con consulados en Ucrania, 16 han aumentado el número de negaciones a solicitudes de residencia: España en 2,5 veces; Suiza en 2,8; Portugal en 2,2; Finlandia en 3,3. Posiblemente los ucranianos ofuscados por la propaganda masiva, sucia y falsa, de régimen Poroshenko, y también los centenares de millones de ciudadanos de Occidente, se pongan a pensar, quién es quién para el trabajador ucraniano. Y también pensar, el mínimo, pero pensar – ¿si no es la rusofobia, en el rango de filosofía oficial del régimen Poroshenko, en su esencia, no tanto antirusa, sino en mayor medida antiucraniana?
¡Pensar, digiriendo los datos de la realidad actual!
