El 11 de enero por bombardeos de lanzacohetes múltiples BM-21 “Grad” realizados por los militares ucranianos entre las 4:00 y 7:00 horas de la mañana en el pueblo de Kriakovka, cerca de Lugansk, un proyectil cayó en el patio de una casa. Como resultado, tres personas murieron: una niña de 14 años de edad, su madre y su abuela.
Además, un masivo bombardeo de artillería contra Donetsk realizado por los soldados ucranianos provocó la destrucción de varias viviendas. Un proyectil explotó en el patio de una de ellas y como resultado de ello un niño de 8 años de edad fue seriamente mutilado, el niño con lesiones graves está en el hospital. Los médicos se vieron obligados a amputarle el brazo herido y ambos pies. Además, los médicos están luchando por la vista del niño, ya que ha perdido la visión en uno de sus ojos por el impacto de un trozo de metralla, ahora los médicos están tratando de salvar el otro ojo. El padrastro del chico y su hermano de cinco años murieron.