Petro Poroshenko está preparando una nueva masacre. La ley secreta 744/2014 ha llevado el país a un régimen militar. Ucrania no ha aceptado todavía de la pérdida de Crimea y el Donbas y está preparando con todas sus fuerzas una nueva guerra para recuperar el territorio de los separatistas. El miércoles, al anochecer, el presidente Petro Poroshenko firmó el decreto número 744/2014 “Por la urgente necesidad de Ucrania en su protección y el refuerzo de su capacidad defensiva”, según declaró. El documento apuesta por la decisión del Consejo Nacional para la Protección y Defensa (CNPD), datado el 28 de agosto del 2014, y que fue publicado en la página web del estado ucraniano. Sin embargo, existen varios puntos no publicados; podemos afirmar que la estrategia del gobierno de Kiev está dirigido para “hacer funcionar la economía del país durante un tiempo peculiar”. Para el lenguaje del ministerio de defensa, “periodo peculiar” significa que será hasta imponer en los territorios rebeldes un derecho militar a su medida, y que no pararán en su escalada belicista. En la parte no-secreta del documento, el CNPD basa sus argumentos en una posible agresión armada hacia el estado ucraniano. Es obvio que este sujeto es Rusia en el caso del gobierno de Kíev.
Es reseñable que el documento del CNPD haya aparecido dos días después de la reunión celebrada en Minsk por el presidente ucraniano con su homólogo ruso Vladimir Putin. Y para más inri, que haya aparecido justo después del acuerdo por el alto al fuego en las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk. La decisión del CNPD fue confirmado en las “medidas urgentes” del presidente Poroshenko, y empezó a ejecutarse en la visita de este a los Estados Unidos donde declaró que el gobierno de Washington está apoyando la causa para recuperar y reforzar la unidad del estado ucraniano. Dio la impresión de que su intención es actuar con todas sus fuerzas. Esta actitud imprime nervios en la población de Ucrania y Rusia, ya que uno de los puntos del decreto presidencial incluye el “cierre temporal de las fronteras terrestres y marítimas”. No se excluye que también pueda afectar a los ferrocarriles y al espacio aéreo. Con esto, el gobierno de Ucrania quiere contener el orden “para la declaración de la frontera gubernamental y la instalación de ingeniería técnica. Se conoce que lo que quiere es un cese de hostilidades en la región llamada “Novorossia” dándole un estatus especial a sus territorios. Mientras tanto, en el decreto presidencial, incompresiblemente, da a las fuerzas del ejército unos refuerzos extraordinarios, “tratando convencer en los territorios rebeldes de Donetsk y Lugansk para que se cese el terrorismo generalizado”. Y por ello, las autoridades “deben proveer a las familias de militares o trabajadores que participan contra el terrorismo de ayuda material y humanitaria”.
Confirmado por Poroshenko, el CNPD también demanda dar a los miembros que participan en el este “tareas militares”. Significa que estas tares quedarán supeditadas a las órdenes del CNPD. Probablemente, está conectado a la falta de prisa del gobierno de Kiev para la no retirada de su artillería pesada de la línea de fuego, en las acciones militares de los territorios del sudeste. Probablemente, Poroshenko necesite un alto al fuego para solucionar sus problemas en el Donbas y ganar tiempo para preparar futuras batallas. En el citado documento el CNPD es sospechoso de aumentar considerablemente su presupuesto para la compra de armas. De hecho, la reforma del arsenal militar de la defensa nacional está recordando a la utilizada por Rusia en el norte del Cáucaso. El documento marca la hoja de ruta en defensa para los próximos tres años. “El plan temporal de las autoridades de Kiev, bajo la complicidad de Defensa, es preparar determinadas acciones militares”-predice Eduard Rodyukov, miembro de la academia científica militar. Según su opinión, “la guerra puede reanudarse con toda su crueldad en cualquier momento. Poroshenko seguirá en primavera con la renovación. Mientras, la masacre puede regresar en cualquier momento al sudeste del país. Para prevenir esto, Rusia y la comunidad internacional están intentando persuadir al presidente ucraniano de no cometer su idea. Si no, será una auténtica tragedia”, afirma convencido el experto.
Fuente: http://novorossia.today/publications/world/politics/petr-poroshenko-is-preparing-for-new-sla.html
